Hace rato que no reportaba nada, pero ustedes saben, las ocupaciones, primero el deber. Intentare no perderme por tanto tiempo. Miren el carrito que me encotre caminando en cualquier centro comercial de Puerto Rico, nada menos y nada mas que un espectacular Lamborghino Diablo. De admirar el carro y de envidiar al dueño
Deja una respuesta